La porción ideal varía entre 10 a 15 gramos diarios, una cantidad que se puede traducir en beneficios para la salud. Sin embargo, los expertos advierten sobre la importancia de considerar las patologías de cada persona.
El pasado 1 de febrero, se celebró el Día Mundial del Chocolate Negro, un alimento con origen en antiguas civilizaciones, que destaca por contener hasta 80% de granos de cacao y que ha sido objeto de múltiples estudios científicos que respaldan sus positivas propiedades para el bienestar general.
Natalia Díaz, nutricionista y docente de la Universidad del Alba explica que: “La mayor parte de los beneficios para la salud asociados al consumo de chocolate negro se atribuyen a las variedades que cuentan con un alto contenido de cacao, es decir de 60% o más, que son considerados de mayor calidad”, Esta profesional explica que las porciones recomendadas generalmente varían entre 10 a 15 gramos diarios, equivalentes a dos cuadros. En esa línea, argumenta que “a pesar de que se trata de un alimento bastante completo, el consumo debe adecuarse a las necesidades individuales de cada persona y teniendo en cuenta las patologías existentes. Por ejemplo, el chocolate amargo sin azúcar se puede recomendar a pacientes con restricción de azúcares”. indicó
A continuación, la nutricionista detalla algunos de los potenciales beneficios para la salud asociados al consumo moderado de este alimento:
–Protege el corazón y reduce el riesgo de infarto agudo al miocardio.
–Activa positivamente el ánimo.
–Es una buena fuente de fibra.
–Contiene minerales esenciales como fósforo, calcio, potasio, sodio, magnesio, zinc y cobre.
–Posee vitaminas A, B y E.
–Reduce la presión arterial, el colesterol total y el colesterol LDL, comúnmente conocido como “malo”.
–Contiene compuestos polifenólicos, antioxidantes naturales que aportan a la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles y desempeñan funciones biológicas fundamentales como antitrombótica (previene la formación de coágulos), anticarcinogénica (previene el cáncer), antidiabética (regula los niveles de azúcar en la sangre), antiinflamatoria y anti obesogénica.