Tras los días de fiesta, en los que suele haber mucha comida, se puede subir entre dos y hasta siete kilos. Algo que suele ocurrir durante las fiestas patrias o las vacaciones, considerando que una empanada tiene 450 calorías, por ejemplo, o que un pan amasado tiene 429 calorías.
No obstante, luego de los grandes banquetes se puede volver a comer saludable y recuperar un peso normal.
La nutricionista Giselle Muñoz, especialista del Centro de Nutrición y Bariátrica de Clínica Las Condes, señala que el principal problema es la retención de líquido, por el exceso de comidas con sal, por ejemplo. “Si nos desordenamos mucho uno puede tener 1 ó 2 kilos en exceso después del fin de semana largo, y ahora la idea es tratar de volver a la tranquilidad, a la calma, tratar de volver a respetar nuestros horarios de alimentación”, sostiene.
Hay que enfocarse no en una dieta, sino en comer saludable, incorporando frutas y verduras. ¿Hay alimentos prohibidos inmediatamente de muchos días de fiesta? Sí, dice la nutricionista. “Eliminar el alcohol dentro de estos días, las carnes rojas y con materia grasa. Sumar pescado, carnes blancas y ojalá a la plancha, al horno, y harta ensalada al almuerzo y la cena”, recomienda.
Para el próximo fin de semana de fiesta, o tus vacaciones, recuerda intentar respetar los horarios de alimentación, sin saltarse el desayuno, por ejemplo, porque eso hará que quieras comer más al almuerzo.
Comer lento y relajado para notar cuando estés satisfecho(a), elegir sólo algunas opciones de las comidas altas en grasa o aceite disponibles, no todas ni repetidas; preferir carnes magras, acompañar con abundantes verduras, evitar el alcohol o preferir champaña o vino. Ten en cuenta que un choripán tiene 408 calorías, mientras que 200 gramos de pollo asado tienen 244, por ejemplo, y un filete asado 248.
Fuente: Clínica Las Condes