El Banco Central resolvió subir la tasa de interés referencial en 150 puntos para tratar de frenar la inflación. Por unanimidad y por debajo de los pronósticos más altos de los mercados -que habían estimado que subiría al 7,5 por ciento esta reunión-, el consejo del emisor incrementó la denominada tasa de política monetaria del 5,5 al 7,0 por ciento, su mayor nivel en 13 años.
En un comunicado, el Central estimó “las perspectivas de inflación de corto plazo volvieron a aumentar, acercando la inflación anual a cifras de 10 por ciento”. “Las expectativas de inflación a dos años plazo permanecen por sobre 3 por ciento desde hace varios meses, situación que seguirá siendo monitoreada por el Consejo”, indicó.