Bélgica cerró una gran campaña al quedarse con el tercer lugar del Mundial de Rusia 2018 tras derrotar por 2-0 a Inglaterra en un duelo disputado en San Petersburgo.
Los “Diablos Rojos” fueron ampliamente superiores desde el principio y complicaron a los dirigidos por Gareth Southgate con su rapidez en el ataque. De hecho, a sólo 4 minutos de haber comenzado el encuentro encontraron el gol para ponerse arriba en el marcador.
El contragolpe comenzó con una veloz salida del portero Courtois, quien cedió para Chadli, pase para Lukaku, devolvió para Chadli, quien centró para Meunier, que concretó con un remate de derecha desde el centro del área. 1-0.