Luego de la derrota 3-0 contra Argentina en Buenos Aires, la Selección Chilena estaba obligada a vencer a Bolivia por la octava fecha de las Eliminatorias Sudamericanas para mantener -de alguna forma- sus chances en la ruta mundialista, pero nuevamente todo terminó en pesadilla y la Verde, por primera vez de manera oficial, triunfó en Santiago por 2-1.
Ya habia un ambiente raro, primero por la baja convocatoria de público ya sea por la desilusión de los hinchas, como tambien por las sanciones de la FIFA que redujeron a 24 mil asistentes, la asistencia al Estadio Nacional, El partido comenzó pasadas a las 18 horas, y a pesar de algunas llegadas, el primer golpe vino a los 13 minutos por una mala salida de Matías Catalán que aprovechó Roberto Fernández, quien centró para la solitaria aparición de Carmelo Algarañaz (12′) que silenció el Estadio Nacional.
El tanto altiplánico golpeó al conjunto nacional y el técnico Ricardo Gareca realizó un cambio que sorprendió a todos: Vicente Pizarro por Ben Brereton, movimiento que causó confusión y pifias. Eduardo Vargas, tras falla de Carlos Lampe, empató y rompió la sequía goleadora de Chile (38′).
Sin embago, el mazazo vino a los 45’+1′: un nuevo error en las marcas y Miguel Terceros sentenció el marcador.
La Roja tuvo ocasiones para empatar, algunas más claras que otras, incluso un potencial penal que finalmente no se concedio sobre el final, pero no lo consiguió y cerró una doble fecha desastrosa sin puntos, cada vez más lejos del Mundial y con un proceso que empieza a ser duramente criticado.