“Si quieren hablar, hablan desde la cárcel y punto” dijo el líder del partido Republicano cuestionando las señales de Interior en materia de seguridad. Sobre la convención acusó un “mal trabajo” y anticipa un plebiscito de salida con resultado “muy ajustado”.
Cuestionando las señales del gobierno y crítico sobre la dualidad de criterios en la gestión de Interior en materia de seguridad, el senador Rojo Edwards (Republicanos) hizo un llamado a rectificar el rumbo, respaldar a las policías y tomar diferentes medidas para controlar el aumento de hechos violentos que percibe la ciudadanía.
“Lo que tiene que haber es una condena al terrorismo y no llamarlo violencia rural o delincuencia;
Terrorismo y a los terroristas hay que darles con todo. No hay conversación ni diálogo con los terroristas, los metemos presos y si quieren hablar, hablan desde la cárcel y punto”, declaró el parlamentario en el programa “Profundidad de Campos” de TV Senado.
Para Edwards “lo primero es la empatía con las víctimas. Si la autoridad tiene más empatía por el victimario es muy complejo porque la víctima se siente desamparada. Creo que el gran problema en materia de seguridad es que el gobierno está enviando las señales equivocadas”.
El senador cuestionó el fin del estado de excepción en el sur del país, separando cualquier relación con las reivindicaciones mapuche. “Cuando se justifica el terrorismo con la legítima causa del pueblo mapuche tenemos un problema de señal gigantesco”, dijo.
“El pueblo mapuche no tiene nada que ver con esto. Cuando se dice ‘la causa mapuche’, no señor. Acá hay unos violentistas que utilizan la causa mapuche y nadie tiene derecho a hacer esa vinculación”, añadió.
Al mismo tiempo el líder del partido Republicano cree que hay dos perfiles diferentes en Interior: “La distancia entre las declaraciones de Izkia Siches con las del subsecretario (Manuel Monsalve) muestran las dos almas que hay en el gobierno en esta materia”.
Sobre Carabineros, afirmó que “si ellos van a poner su vida en riesgo y usted no los apoya, es muy difícil sacar adelante su labor”. Por esto pidió fortalecer lo que define como “una gran institución”.
“Si lo primero que hace como gobierno es levantar las querellas de ley de seguridad interna del Estado a quienes quemaron pymes, iglesias, saquearon supermercados, quemaron estaciones del metro ¿qué dicen los delincuentes? Ajá, aquí la mano viene blanda. Las señales de la autoridad son claves y por eso tenemos una espiral de aumento de violencia, en bandas como en el barrio Meiggs que está lleno de gente con pistolas y claro, si hay completa impunidad”, detalló.
Convención: Radical, refundacional y equivocada
“Tenemos que hacer un cambio en Chile muy profundo y está en la dirección contraria de lo que propone la convención constituyente que es a mi juicio es radical, refundacional y equivocada”, es el concepto de entrada del senador Rojo Edwards al referirse al trabajo de elaboración de una nueva carta magna, que entra en una fase decisiva.
En la entrevista consultado por las definiciones que vienen, cómo el resultado del plebiscito de salida del 4 de septiembre, el parlamentario cree que será “muy difícil, va a ser muy ajustado. Lo cual es un problema a favor y en contra”, al no interpretar con un buen margen a ninguna mayoría.
“El problema que estamos viendo es que el mal trabajo de esta convención, su falta de sentido común, los retrocesos civilizatorios que nos están proponiendo en algunos casos, las malas políticas públicas, el fanatismo de algunos ha hecho que su aprobación haya bajado, bajado y bajado y hoy el diagnóstico es negativo, que gane el rechazo”, criticó anticipando que el partido Republicano se pronunciará sobre el texto terminado pero “lo que tenemos hasta hoy es tremendamente mediocre y malo”.
Sobre la presentación de un proyecto de ley que apela a una reforma en este sentido –y que ha causado revuelo incluso al interior de su colectividad- comentó: “¿la pregunta es qué hacemos? Como el rechazo va ganando, porque los constitucionales están tan lejos del sentido común, hay muchas alternativas; panel de expertos, una nueva convención, rechazo a secas… sabe que más se acabó esta cuestión. O alternativas más revolucionarias como asambleas aleatorias liderada por expertos como el caso de Irlanda, son muchas las formas. Lo que estoy claro es que lo que va hasta ahora en la convención es tremendamente malo”, concluyó.