Perú: Pedro Castillo es detenido tras disolver el Congreso

 El presidente de Perú, Pedro Castillo, decretó disolver temporalmente el Congreso e instaurar un Gobierno de emergencia nacional, antes de que el Parlamento debatiera la tercera moción de vacancia o destitución en su contra que podría haberlo apartado de la jefatura del Estado. “A horas de debatirse una nueva moción de vacancia en mi contra me presento ante ustedes, queridos compatriotas, a quienes me debo, para ratificar que no soy corrupto y no mancharía mi apellido”, afirmó el mandatario.

El jefe de Estado peruano agregó que “durante todo el tiempo que llevo de gobierno la única acción del Parlamento ha sido intentar sacarme del poder”, añadió. Ante ello llamará a nuevas elecciones del Congreso y decretó toque de queda para disuadir de posibles manifestaciones en su contra. La oposición ha calificado la decisión de Castillo como un “golpe de estado”, mismo calificativo que usaron los principales informativos y diarios del país vecino.

En tanto, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional de Perú comunicaron que no acatarán la orden del Presidente Pedro Castillo de disolver el Congreso -decisión catalogada por la mayoría del espectro político como un golpe de Estado- por lo que se cuadran con el Poder Legislativo y dejan solo al gobernante. En un comunicado, dijeron que “cualquier acto contrario al orden constitucional establecido, constituye una infracción a la Constitución y genera el no acatamiento por parte de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú”.

Las entidades agregaron en el escrito que invocan “a la ciudadanía a mantener la calma y confiar en las instituciones del Estado legalmente establecidas”. En tanto, elTribunal Constitucional, rechazó la medida tomada por Castillo, asegurando que ésta vulnera el Estado de Derecho. Asimismo, ya son varios los ministros que renunciarono al Gobierno, mientras que la vicepresidenta, Dina Boluarte, rechazó la disolución del Congreso, asegurando que se trata de “un golpe de Estado”.

La policía procedió a la detención del presidente destituido, por delitos flagrantes contra el orden constitucional.

El exmandatario se encuentra en la prefectura de Lima tras haber dejado el palacio de Gobierno en compañía de parte de su familia.